EL UNIVERSO ENTERO ESTÁ EN UNA COPA DE VINO
En una copa de vino podemos ver representado todo el Universo, y aunque intentemos dividir las ciencias, la naturaleza es solo una.
Un poeta dijo una vez: “El universo entero está en una copa de vino”. Probablemente nunca sabremos a que se referiría exactamente, los poetas no escriben para ser entendidos. Pero es cierto que si miramos atentamente una copa de vino podremos ver todo el universo. Están las cosas de la física: el líquido que forma remolinos y se evapora en función del viento o del tiempo, los reflejos en el vidrio y nuestra imaginación, añade los átomos. El vidrio es una destilación de las rocas de la Tierra y en su composición podemos encontrar los secretos de la edad del universo y la evolución de las estrellas. ¿Qué compuestos químicos encontramos en el vino? ¿Cómo llegan a ser lo que son? Fermentos, encimas, sustratos y productos. Aquí encontramos la gran generalización: toda forma de vida es fermentación. Nadie puede descubrir la ciencia que hay en una copa de vino sin descubrir, como hizo Louis Pasteur, la causa de muchas enfermedades. ¡Cómo de vívido es un vino, dependiendo de la conciencia del que lo observa! Si por alguna razón, nuestras pequeñas mentes dividen esta copa de vino, este universo, en partes -física, biología, geología, astronomía, psicología, etc.- ¡recordemos que la naturaleza no las diferencia! En definitiva, volvamos a unirlo todo de nuevo sin olvidar la razón de ser del vino. Vamos a permitirnos un último placer: ¡bebamos y olvidémonos de todo!
Richard Feynman, “The Feynman lectures on Physics” (1964)
