El ritmo de las estrellas
Las viñas cuando se cultivan en agricultura ecológica y los vinos si se elaboran de forma natural, realizan su metabolismo vegetal y los procesos de fermentación, decantación, maduración… de una forma acordada y armónica con los ciclos y ritmos de la Luna y estrellas, para fijar tonalidades de color, diversidad de aromas y complejidad de sabores.
Explicado de una manera sencilla e intuitiva, los colores, aromas, sabores… como todo lo que existe en el universo, es el resultado de la acción de los cuatro elementos, fuerzas o energías formadoras: Aire, Agua, Fuego y Tierra.
También nuestra vida une a la especie humana con el cosmos cercano a través de sus ciclos y ritmos. Y de nuevo, las cuatro energías formadoras nos ayudan a entender la orientación de nuestros gustos y la capacidad particular de apreciar sensaciones. Maravillosamente somos y actuamos como Aire, Agua, Fuego o Tierra, conectados a través de los sentidos y emociones con colores, aromas, sabores y texturas.
En viñas y vinos:
A través del metabolismo de la viña y los procesos naturales de elaboración produce en uvas y vinos delicadeza y armonía en colores y aromas.
En las personas:
A las personas las dota de carácter comunicativo, impulsor de nobles proyectos. Su forma de ser equilibrada y sociable las hace arrebatadoras.
En viñas y vinos:
En las viñas y vinos actúa fijando suavidad en sus sabores. Hace a los vinos suaves y fáciles de beber.
En las personas:
A las personas las hace introspectivas y emocionales, dotadas de magníficas cualidades artísticas y de un fiable instinto empático que los conduce con acierto por su entorno.
En viñas y vinos:
En las viñas y vinos fija el calor solar en los colores y desarrolla cualidades frutales en vinos plenos de energía y goloso postgusto.
En las personas:
A las personas las hace intensas, directas y fogosas, capaces de transmitir una determinación y entusiasmo que resulta fascinante a los demás.
En viñas y vinos:
En las viñas y vinos desarrolla los caracteres propios del terruño; y configura las formas tradicionales de elaboración de los vinos a los que transmite fortaleza y permanencia.
En las personas:
A las personas las dota de una capacidad notable de autosuficiencia, que ofrece al mundo una admirable seguridad y eficacia en la gestión vital.
Estos cuatro símbolos te ayudan a identificar el carácter del vino
Aire
Agua
Fuego
Tierra